El ministro de Antigüedades de Egipto, Jaled al Anani, informó sobre el descubrimiento de una tumba de 4 mil 400 años de antigüedad, perteneciente a un sacerdote real de la corte del faraón Nefer-Ir-Ka-R, de la V dinastía localiza en Saqqara, al sur de El Cairo.
Dentro del lugar se pueden ver escenas de la vida del sacerdote llamado Wahtye con su madre, esposa y familia. Además, hay numerosos nichos con estatuas cromadas de sus familiares fallecidos.
La V Dinastía gobernó aproximadamente desde el año 2.500 a.C. hasta el 2.350 a.C., poco después de que se construyera la famosa pirámide de Giza.
Las imágenes en las paredes muestran escenas cotidianas como la fabricación de cerámica y el vino, ofrendas religiosas, actuaciones musicales, la fabricación de sarcófagos, la caza de aves y barcos navegando, así como el nombre de la esposa del sacerdote, Weret Ptha y su madre, Merit Meen.
El ministro Jaled al Anani, ha dicho que es la tumba "más bella" descubierta este año y que ha destacado por su "excepcional" estado de conservación.
La tumba está formada por una estancia rectangular de unos 10 metros de profundidad y tres de ancho. Fue descubierta el pasado noviembre por una misión egipcia que trabaja en una necrópolis dedicada a los animales, en las afueras de El Cairo.
El gobierno egipcio ha anunciado el descubrimiento de tumbas y otros hallazgos de la época faraónica para tratar de incentivar el turismo en el país.
La ministra de turismo del país, Rania al-Mashat, dijo que "esperamos que para fines de 2018 no estemos en los niveles vistos en 2010. Estamos tratando de poner a la industria en una base competitiva en comparación con nuestros pares".
Las autoridades egipcias estimaron que este año, visitarán el país entre 10 y 11 millones de turistas, después de la crisis que vivió el sector desde la "primavera árabe" en 2011 y a pesar de los últimos atentados terroristas.
Esto luego de que el turismo experimentara un gran descenso después del levantamiento de 2011 que derrocó al entonces presidente, Mohamed Hosny Mubarak. La situación se complicó aún más en 2013 tras el derrocamiento del presidente Mohamed Morsi y una serie de ataques terroristas posteriores.
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